Consejos para liderar tu equipo
Cuando comienza la temporada, iniciamos un nuevo Proyecto que toca liderar es el momento de sentar las bases para construir un proyecto que ilusione y motive a tu equipo.
Conseguir que tu equipo funcione no es sólo cuestión de que sepas transmitir tus conocimientos. Con jóvenes y no tan jóvenes deportistas, la autoridad ya no se impone, el liderazgo se gana, no eres el líder por ser el entrenador/ra.
El tipo de líder que quieras ser, depende de muchos factores muchas veces ajenos: el equipo que te encuentras, objetivos del club para la temporada, competiciones en juego, las individualidades y los egos, etc. Pero otros factores dependen exclusivamente de ti, de quién eres y cómo te preparas. Por supuesto, no hay fórmulas magistrales, pero se pueden establecer unas reglas útiles para que un buen funcionamiento.
En este sentido, me parece muy interesante aplicar en el ámbito deportivo las 6 reglas del liderazgo de Andy Cohen.
Crea un DESAFÍO que sea equilibrado. Una meta lo suficientemente atractiva para lograr el compromiso. Normalmente, al inicio de la temporada esto es fácil, hay ilusión, ganas, pero ten cuidado con las expectativas desajustadas. Deben creer que tienen la habilidad suficiente para lograr sus metas.
Los desafíos adecuados refuerzan el compromiso y la motivación. En deporte base, es preferible que el desafío se plasme en objetivos de rendimiento más que de resultado. Por supuesto, siempre realistas y medibles.
Crea una experiencia SOSTENIBLE: Una vez definido el proyecto que convenza e ilusione a tu gente, debes encontrar la forma de mantenerlo, no puede desvanecerse a la primera de cambio. Hay que estar preparado para superar adversidades (lesiones, malos resultados, etc…).El camino para lograr el desafío no puede borrarse. Preparar objetivos intermedios y a corto plazo te ayudarán.
Demuestra que sabes SUDAR LAS CAMISETA: visibiliza tu esfuerzo, la lucha. Si tu equipo ve cómo te esfuerzas y trabajas por y para él, los vínculos emocionales se verán reforzados. La empatía es la clave. Si les pides sudor, suda primero, si les pides esfuerzo, que te vean exhausto, si hay que llorar, que vean tus lágrimas…..
Se TRANSPARENTE: todo el mundo sabe lo que haces. Trabajas para el equipo, no hay “Ases en la manga”.
Es visible tu esfuerzo, tu compromiso, incluso tus errores. Si sabes rectificar y aprender de ellos, tu liderazgo probablemente se vea reforzado.
Se HUMAN@: significa compartir algo tuyo con otra persona, esto no significa que te muestres vulnerable, puedes demostrar habilidades positivas, sentido del humor, asertividad, empatía, solidaridad, etc. Ante todo estás con personas, en muchos casos muy jóvenes, que ven en ti un modelo a seguir, no sólo enseñas técnica y táctica.
CUMPLE LAS PROMESAS: todo lo que dijiste que harías, hasta llegar a completar el desafío. Durante el camino es importante que vayan viendo cómo se logran objetivos, así se irá reforzando tu liderazgo y su motivación se ve reforzada, saben por dónde van y ven que cumples lo que prometiste, eso también te da margen para corregir posibles errores o superar problemas imprevistos.
Lo que está claro, es que como entrenadores y entrenadoras, es importante saber gestionar las emociones, a parte por supuesto, tener los conocimientos adecuados. Se gestionan personas, podemos llamarlo dirigir, canalizar, liderar, capitanear, etc. Pero de lo que se trata es que crean en vosotr@s, en vuestra capacidad para tomar las decisiones correctas, justas, en los conocimientos y en vuestras habilidades personales para lograr los objetivos propuestos.
Y no olviden que para ello cuentan con profesionales de la #Psicolgíadeportiva.