Lo que la marea nos traiga
Los poetas de esta bendita tierra, van y vienen como las mareas, nunca sabes lo que volcará en la playa…..a veces nos trae regalos inmensos, nos trae poetas, que antes de nacer, habían viajado por el mundo y se habían enriquecido, para regalarnos luego, todo el saber, toda la poesía, todo el amor hacia su tierra y gentes…..otras veces deja retales del que quiere y no puede y acaba en el olvido, otras ególatras que solo escriben para ellos, componiendo obras, que en el fondo solo buscan engordar sus egos, aunque las disfracen…..suerte que la resaca del vendaval al final se los lleva también. Y hubo una ocasión, que nos dejó al poeta del pueblo……
En otra ocasión repasaremos su maravillosa trayectoria carnavalesca; pero, su valentía, su amor hacia su tierra, sus tradiciones, el amor inmenso al ser humano, su espíritu libre y revolucionario, su dulzura, y su poesía, fue lo que un bendito día, nos dejó la marea en Cádiz.
De la cuna del barrio flamenco, en Santa María, vio la luz allá por el año 38 Pedro Romero Varo, y desde el año 67 cuando hizo “los maniseros cubanos” estuvo profundamente ligado al carnaval de Cádiz, escribiendo una de las páginas más gloriosas de la fiesta.
Autor valiente y con carisma, pero a la vez poeta eterno, siempre defendió a los que menos tenían, nunca tuvo miedo a la represión en años convulsos y comprometidos, para decir verdades, su delicada pluma, regalaba piropos eternos a la tacita de plata, que poniente y levante se encargan de mover por las calles, para que nunca caigan al olvido, culto, no dudaba en cruzar el charco para acordarse en una letra memorable al “Che Guevara” de la lucha de los pueblos, tan elegante como sus napolitanos, y tan cercano como la dorada arena de su playa.
Muchos dicen que su obra maestra fue el popurrí de nuestra Andalucía, pero que quieren que les diga, yo creo que la obra maestra fue, que el destino nos regalase a un poeta como él. Sus letras eternas, harán que nunca muera, siempre pasearán por los rincones del barco que anclado en una esquina, soñaba con vendedores de caballas caleteras, de su greñuo, de su lucha por los que nada tienen, la esperanza de los que no creen, el valor de los cobardes…….Poeta universal, poeta del pueblo, que una bendita mañana nos dejaba en la orilla, la marea que viene y va, y que un día se lo volvió a llevar, al son de su pasodoble de pregones.
“El 22 de noviembre va cruzando un caletero,
llevando su caña a cuestas lleva su vida en su cesta
y el adiós, de Cái entero”
Creo que como a mi a muchos habras emocionado por la delicadeza y el respeto que le has dedicado. Enhorabuena! Los grandes poetas y buenas personas no desaparecen nunca.
CAI, TIERRA Y MAR DE ARTISTAS, QUE APRENDAN LOS JUNTA LETRAS DE UN POETA DEL CARNAVAL, POCOS HA ESTADO ACLA ALTURA DE PEDRO ROMERO, POCAS VECES SE LLEGA TAN ALTO VOMO LLEGÓ ÉL. SE DICE QUE CUANDO LAS LETRAS DE UN POETA SE CANTA A LA ORILLA DE LA PLAYA, ESA LETRA YA ES DE PUEBLO....Y ¡¡ CUANTAS VECES SE HA CANTAO LAS DE PEDRO ROMERO!!! .
DI SEÑOR ARTE, A LA ALTURA DE PICOS