Carabela Portuguesa en la Playa de Camposoto.

Tras el temporal Enma ayer a primera hora de la mañana ha aparecido en la orilla de la playa de Camposoto una colonia de Carabelas Portuguesas, especie muy venenosa incluso después de muerta.

Han sido vistas tanto en la orilla como en arena seca, pues fueron arrastradas por la corriente. Tras ser localizadas avisaron a Protección Civil y Policía Nacional que casualmente estaban en la playa tras el aviso de la aparición del proyectil militar, como ya adelantó este medio.

La Carabela Portuguesa (Physalia physalis), también conocida como fragata portuguesa, agua mala, botella azul o falsa medusa, parece una medusa pero no lo es. Suele vivir en aguas tropicales y subtropicales, pudiendo llegar a medir cincuenta metros con los tentáculos extendidos, aunque lo normal es que alcance unos diez metros.

Es una especie un tanto peculiar, ya que se trata de un organismo colonial, es decir, seres vivos organizados bajo bases cooperativas para mantener viva la colonia, por lo que sigue siendo peligrosa una vez muerta.

Carabela Portuguesa en la Playa de Camposoto.

Según muestra la imagen, la parte azul más clara, es denominada vela gelatinosa, la cual le sirve a la Carabela para navegar por las aguas a grandes velocidades impulsada por los vientos, mareas y corrientes marinas. De otra parte se observa los tentáculos de color azul más oscuro, que utilizada para atrapar a sus presa.

La colonia no solo ha aparecido en las playas isleñas, también se han encontrado ejemplares en las playas de Las Redes en el Puerto de Santa María, en Barbate y en la capital.

Es recomendable no tocarlas, ya que son venenosas para personas alérgicas pudiendo causar paro cardiaco, y de igual manera a las personas sin alergias ocasionando urticaria debido a su toxicidad.