La Virgen, en una fotografía de Quijano a mediados del siglo XX.

La Hermandad de la Virgen de la Soledad merecía tener su larga, rica y variada historia investigada y editada en un libro. Las juntas de gobierno presididas, primero, por José María Ruiz Coello y, después, por Antonio Pérez Vila, así lo entendieron y así lo deseaban desde hacía tiempo.

El oportuno encargo se me hizo en 2011, poco después de que se publicaran mis libros sobre la Historia de la Hermandad del Cristo de la Expiración y sobre El Castillo de San Romualdo. Bien cultural de la ciudad de San Fernando, editado por la Universidad de Cádiz. El trabajo se prolongó durante tres años de exhaustivas investigaciones, estructuración y redacción del texto, así como de acopio de imágenes para ilustrarlo. Tuve que simultanearlo con otras investigaciones históricas que efectuaba paralelamente y con la realización de algunos cursos de posgrado universitario que también absorbieron por entonces mi tiempo y mi dedicación.

Pero, por fin, el anhelado encargo fue una realidad a principios de 2015 y pude entregarlo oficialmente a la junta de gobierno en la cuaresma de ese año. La Hermandad realizó a partir de entonces las gestiones pertinentes para su edición y publicación. Tras algunos meses de búsquedas e incertidumbres, el prestigioso Servicio de Publicaciones de la Diputación Provincial de Cádiz se hizo cargo de esta tarea, gracias a la mediación de D. José Loaiza García, hermano de esta corporación y ex presidente de ese organismo político-administrativo.

El libro fue maquetado con celeridad en el último trimestre de 2015, estando completamente finalizado en diciembre de ese año, tras las pertinentes revisiones. La estupenda maquetación de toda la amplia obra corrió por cuenta de Alfredo Candela, diseñador gráfico de la Diputación Provincial, autor también del elegante diseño de las cubiertas.

El resultado es un grueso tomo de 700 páginas, cuya envergadura habla por sí sola de la rica historia de la Hermandad y de la ímproba labor de investigación histórica que se ha realizado. El pórtico de la obra lo componen dos presentaciones escritas por los dos hermanos mayores que han presidido la hermandad durante el tiempo de la elaboración del libro. A ellas les sigue un prólogo justificativo y explicativo de quien escribe estas líneas, como padre de la criatura, al que remito para más información acerca de los criterios empleados en la elaboración del extenso texto y sobre su contenido.

No obstante, puedo decir aquí grosso modo que la historia de la hermandad se divide en siete capítulos (el último de ellos es, en realidad, un breve epílogo), que abarcan desde sus oscuros inicios a mediados del siglo XVIII hasta la actualidad. Este recorrido a través del tiempo no se ha hecho de un modo aislado de su contexto histórico, sino procurando reflejar en todo momento la historia religiosa isleña, la local de la ciudad de San Fernando y aun la propia historia nacional española. Unas 1.500 notas a pie de página dan el necesario tono riguroso y científico a los capítulos, revelando las fuentes documentales y bibliográficas de las que se ha extraído toda la información necesaria.

La obra se completa con tres apéndices: una útil cronología, a modo de síntesis histórica; una nómina de todas las juntas de gobierno que han regido la hermandad desde sus primeros tiempos históricos hasta hoy día; y un valioso apéndice documental formado por unos 65 documentos históricos, la mayoría transcritos y publicados por primera vez, procedentes de todos los archivos consultados, y que abarcan por completo la dilatada biografía de la corporación. Una exhaustiva relación de las fuentes consultadas cierra la obra.

El libro está ilustrado con 150 imágenes en blanco y negro, muchas de ellas inéditas. Proceden en su mayoría del archivo de la Hermandad, del reputado e imprescindible archivo histórico fotográfico de Quijano, de los ricos fondos documentales del Museo Histórico Municipal, y de diversas colecciones particulares.

Creo finalmente que la Historia de la Hermandad de la Virgen de la Soledad, libro terminado y publicado a caballo de los años 2015 y 2016, no podía llegar en una coyuntura mejor: el cincuentenario de la bendición del Cristo de la Redención (2015) y el 250 aniversario de la creación del municipio independiente de la villa de la Real Isla de León (2016), efemérides esta a la que la Hermandad de la Soledad contribuye desde luego con la publicación de esta obra. Y llega también casi a las puertas de la próxima efeméride que celebrará esta misma asociación religiosa en 2018: el 250 aniversario de su aprobación definitiva y erección canónica en la Iglesia Mayor Parroquial por el obispo fray Tomás del Valle.

Un libro que los hermanos y cofrades en particular, y el público isleño en general, no deberían, por tanto, dejar de adquirir y consultar para conocer más y mejor a la que, por derecho histórico propio, es la madre de todas las cofradías isleñas. Mi sincero y profundo agradecimiento a todos aquellos que lo han hecho posible.

Fernando Mósig Pérez