El Cementerio de La Casería se desploma ante la inacción de sus responsables
"En enero de 2016, justo cuando la Isla se vanagloria de sus 250 años, cae desplomado el muro noreste de este BIEN de INTERÉS CULTURAL gracias a la desidia y la inacción de los responsables"
Es la denuncia que en menos de 24 horas ha barrido las redes sociales llegando a la cifra -por el momento- de 10.000 personas indignadas con el reciente desplome del muro nordeste del Cementerio de La Casería.
Esta zona espera desde el año 2005 la inversión necesaria para la aplicación de un proyecto aprobado por el Ministerio de Medio Ambiente y Demarcación de Costas cuyos orígenes se remontan, sin embargo, muchos años atrás. Actualmente guardado en el cajón contemplaba, además de la regeneración de la playa y el aprovechamiento de todo el litoral, la puesta a punto del mal llamado Cementerio de los Ingleses -por ser éstos protestantes-, limítrofe con los antiguos terrenos de la Fábrica de San Carlos.
El monumento está incluido en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural por su vinculación a los sucesos de 1810 y, además, forma parte del mapa de fosas comunes de la Guerra Civil como uno de los lugares donde, según fuentes orales, pudieron ser fusilados y enterrados extramuros un buen número de vecinos. Pese a ello, el inmueble se encontraba en un precario estado de conservación, no sólo por la acción de los agentes naturales, sino también por la del hombre, que ha venido convirtiendo las inmediaciones en un gran estercolero. Colectivos por la defensa del Patrimonio se desplazaron hasta allí hace aproximadamente un año para denunciar públicamente la inacción de las administraciones competentes. Guiados por Miguel Ángel López Moreno -quien ha llevado a cabo un exhaustivo trabajo de investigación sobre el Cementerio a la espera de oportunidad editorial-, tuvieron la oportunidad de conocer una historia que se remonta a la Guerra de la Independencia, cuando la ingente cantidad de franceses cautivos en las cárceles-pontón existentes en La Bahía y la mortandad sufrida a causa de las epidemias de fiebre amarilla, hicieron necesaria la construcción de un cementerio acorde al reglamento borbónico. Sin embargo, no dejaron de poner el dedo en la llaga con su aparición, al día siguiente, en todos los medios de comunicación, para alertar sobre el estado de abandono en que se haya sumido el enclave.
La cosa no quedó ahí, ya que durante el ciclo de entrevistas que la plataforma Patrimonio La Isla formuló a los diferentes candidatos a la alcaldía, se les cuestionó, precisamente, sobre la ejecución de "obras mínimas para evitar que vaya a más el deterioro de elementos del Patrimonio a los que apenas se ha prestado atención, acometiendo labores de limpieza en sus alrededores y promoviendo un turismo de contenido cultural en torno a ellos". En este sentido recordaban al molino de San José, al Puente de Ureña o al Cementerio de los Ingleses. La actual alcaldesa, Patricia Cavada, se apresuró a contestar que "aunque muchos de estos elementos no son competencia directa de la administración local -el Cementerio está bajo la jurisdicción de Defensa- comenzaremos a reivindicarlos desde el minuto uno", añadiendo además que "no estamos dispuestos a perder Patrimonio por estar discutiendo con otra administración, por lo que realizaremos aquellas actuaciones necesarias para evitar un mayor deterior0 y dignificarlo mientras permanece a la espera de su recuperación".
Lo cierto es que hasta el momento, todo sigue igual. No sólo no se ha actuado sobre ellos sino que tanto el cementerio como el molino están sucumbiendo a las leyes de la gravedad. Si hace escasos meses reivindicaba el historiador Jonatan Alcina el desprendimiento de algunos de los sillares que componen la portada barroca de San José, ahora es el propio Miguel Ángel López Moreno quien lamenta el desprendimiento de un BIC "de cuya importancia patrimonial es totalmente consciente la Marina".
[…] dos meses más tarde y con parte del lienzo nordeste tumbado por la acción de la naturaleza –así lo hizo constar este medio-, no han recibido aún respuesta, por lo que la redacción se ha puesto en contacto con su promotor […]