Nieves Morano

El cáncer de mama no ha podido con Nieves Morano. Una isleña con carácter a la que hace año y medio sobrevino esta terrible enfermedad padecida por tantas mujeres con las que ahora, tras triunfar en su batalla particular, se siente fuertemente identificada.

Ya durante el proceso, con todo lo que este implica, jamás perdió la esperanza, su ánimo, el buen humor que la caracteriza. Todos estos sentimientos necesitaban una salida, una expresión de su alma que encontró en Internet la vía idónea para ser compartida con personas en su misma situación, con unas familias y amigos que sufrieron junto a ella mientras escalaba la montaña. Así, a través de un blog que semana tras semana acrecentaba el número de visitas -lo que la llevó también a intensificar sus niveles de actividad-, Morano relataba el día a día de su lucha, "siempre desde una perspectiva positiva", confiesa la protagonista orgullosa de la fuerza que la ha acompañado durante el tratamiento.

Portada del libro.

Tal fue el éxito de sus vivencias 'online', que muchas voces comenzaron a incitarla para que estas fueran plasmadas sobre el papel. Así nació un libro: 'Mujer de las mil batallas', que tras el éxito obtenido con una discreta auto publicación a primeros de verano -las 300 copias impresas se agotaron casi al momento-, ha sido reeditado ahora con un formato renovado cuyos beneficios irán dirigidos a la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). Esto supone para la isleña una triple gratificación: en primer lugar, abrir su corazón a un mundo que reconocerá sus vivencias; asimismo, ayudar a compañeras de batalla que actualmente se encuentren en la misma situación que ella ha superado y, en última instancia, contribuir económicamente con el colectivo que defiende esta causa en San Fernando.

La obra es toda una oda al optimismo pese a los momentos sufridos. Entre el gran número de anécdotas que los lectores encontrarán en sus páginas, destaca la protagonista "la fiesta de pelucas que organizamos cuando perdí el cabello", o "los 'selfies' que me tomaba en cada sesión de quimioterapia para que mis seres queridos vieran lo bien que lo estaba llevando", recuerda. Morano también ha aprovechado para retomar durante la experiencia algunas de sus antiguas costumbres, y organizar más comidas, cenas; encuentros en general con las amigas y sus respectivas familias. En definitiva, disfrutar más que nunca de la vida.

"Me gustaría transmitir mi alegría a todas las mujeres que están pasando por lo que yo he logrado superar". Es el principal objetivo de esta luchadora que llevará su testimonio escrito al café cultural La Buhardilla el próximo 25 de octubre, a las ocho de tarde, en una emotiva velada donde vivencias reales usurparán el espacio habitual de las ficciones literarias. Ahora la historia es cierta.