El Programa de Fomento del Empleo Agrario (PROFEA), lo que antiguamente conocíamos como PER, se está convirtiendo últimamente y de forma muy desgraciada, en el mejor programa electoral del Partido Popular. El mismo PP que hasta hace bien poco hablaba de forma muy peyorativa del PER, al considerarlo siempre como un voto cautivo por parte del PSOE y una forma de comprar votos, no duda ahora en utilizar esa misma subvención como arma electoral, ensalzando cualquier proyecto que se realice a través de esos fondos como si ellos fueran los inventores o impulsores de los mismos.

En este caso es indispensable hacer un poco de memoria para recordar cómo nace el PER y de dónde provino para no caer en la trampa que nos intentan tender. Hay que remontarse a 1986, bajo el mandato de Felipe González, para llegar a la gestación de esta subvención que en principio iba destinada a Andalucía y Extremadura y que posteriormente se hizo extensiva a otras CCAA. El PROFEA, por tanto, por mucho que se le quiera cambiar el nombre, es la misma subvención a la que los ayuntamientos tienen derecho desde hace más de 27 años. ¿Cuál es la diferencia? Pues que hasta ahora eran los propios Ayuntamientos, o el SAE, los que gestionaban esos fondos y ahora, casualmente cuando el PP controla más del 70% de las Diputaciones, son estas las que gestionan esas subvenciones.

Cuando digo que las Diputaciones gestionan dichos fondos quiero decir exactamente eso: las tramitan, hacen transferencias de una cuenta a otras. Nada más. Siguen siendo los Ayuntamientos los que proponen, elaboran, justifican y desarrollan los proyectos a llevar a cabo en sus municipios. Digo todo esto porque llevo varias semanas leyendo declaraciones por parte de miembros de la comisión local del PP sanluqueño, impuesta desde Cádiz, en la que se vanaglorian de los proyectos que se están llevando a cabo en Sanlúcar, según ellos, ‘gracias al Gobierno de la Nación’.

Los fondos que se destinan a los Ayuntamientos desde el PROFEA están basados en una serie de parámetros que incluyen, entre otros, el número de desempleados y la situación socioeconómica. El Gobierno de la Nación, en una época en la que el desempleo ha alcanzado cifras dramáticas, lo que sí ha hecho ha sido congelar durante los dos últimos años estos fondos. Cádiz, la provincia andaluza con mayor tasa de paro, es la tercera que menos dinero ingresa por este concepto. De lo que sí es responsable el Gobierno de la Nación es de que Demarcación de Costas pretenda ahora cobrar al Ayuntamiento de Sanlúcar 16.000 euros por la celebración de las carreras de caballos, las áreas de juegos o las de sombrillas y hamacas, pero que nunca se acuerdan del litoral sanluqueño para regenerar sus playas. De lo que sí es responsable el Gobierno de la Nación es de haber eliminado la Comisión Nacional para la Conmemoración del V Centenario de la Primera Circunnavegación a la Tierra. De nada sirve hacerse una foto firmando la ILP en la Fundación Puerta de América -tal y como hizo la Sra. Mestre- si no se tiene la intención de presionar a su partido para que restituya dicha comisión.

La ampliación del paseo marítimo hasta Bonanza, aprobado en su día en los Presupuestos Generales del Estado y a la que se comprometió Antonio Sanz personalmente, parece ser que tampoco se va a llevar a cabo y yo le haría una pregunta muy sencilla a la Sra. Mestre: ¿No es el Gobierno de la Nación responsable de todo esto?