Los cofrades, el sustento de la Feria
Son los primeros dentro de los caseteros en llegar al recinto de La Magdalena días antes -incluso semanas- del comienzo de la Feria. Durante el periodo de montaje se afanan y buscan ser un referente cada año dentro del estilo de caseta familiar. Esa es su seña de identidad, una caseta de mayor o menor espacio pero en la que reina el buen ambiente, las sevillanas y la comida tradicional. En total, catorce hermandades y cofradías que se vuelcan para dar lo mejor de sí dentro de sus recintos en el ferial.
La ubicación de la inmensa mayoría se sitúa en la calle Alvarito de la Isla, salvo la hermandad del Prendimiento que lo hace desde su incorporación al ferial en la calle Camarón de la Isla.
La única hermandad que quedaba el pasado año por situarse en la principal calle de cofradías además de la parqueña era la del Ecce-Homo que lo hacía en la paralela a ésta con la confluencia con la calle María Borrico hasta este año que ha pasado a la calle Alvarito de la Isla.
Sobre este traslado, el actual vicehermano mayor del Ecce-Homo, Juan Manuel Quevedo, apunta que "nuestro cambio de ubicación es buscando un ambiente más cofrade, en un lugar más idóneo para nuestra caseta" y señala que "creo que somos la hermandad que lleva montando más tiempo en el ferial -y en su antigua ubicación- puesto que lo llevamos haciendo desde hace 51 años".
Dentro del sistema para gestionar la caseta durante los días que dura la Feria existen en el caso de estas entidades dos modalidades bien diferenciadas y que han ido evolucionando en los últimos años.
Por un lado el tradicional servicio de barra y cocina por parte de los miembros de la propia cofradía que repartidos en turnos dan servicio a todas aquellas personas que se acercan a la caseta. Y por otro lado, y en auge en los últimos años, la contratación de un catering que con un previo acuerdo económico con la hermandad en cuestión se hace cargo de todo lo referente a estos servicios durante toda la semana.
Dentro de estos últimos casos se encuentra la hermandad del Huerto que desde hace tres años cuenta con este tipo de servicio aunque en los días anteriores los miembros de su junta de gobierno y allegados realizan las tareas de montaje y decoración. Su nuevo hermano mayor, José Antonio Gómez Alanís, comenta al respecto que "es el sistema que creemos más conveniente y que nos ha salido más rentable de forma económica pero sin abandonar el sentido familiar de la caseta que es nuestro principal objetivo".