La plantilla de la Ayuda a Domicilio apoya a las compañeras de otras poblaciones que se van sumando a realizar vigilias para reclamar sus derechos.

Puerto Real y Morón han iniciado en los últimos días movilizaciones similares para exigir sus derechos, y el cumplimiento de los pliegos y convenios laborales. Desde San Fernando les mandan aliento y apoyo, y exigen que las administraciones se tomen en serio este servicio y realicen cambios legislativos que limiten el poder de las empresas y faciliten la inclusión de mejoras laborales. Anima a que cada vez más localidades se sumen a la reivindicación de la jornada laboral de 35 horas semanales.

Desde la plantilla del Servicio de Ayuda a Domicilio de San Fernando han mostrado de nuevo “su gratitud, no solo a los isleños, que se están volcando con nosotras; sino a colectivos de otras poblaciones que, ante la existencia de problemas y reivindicaciones comunes, han decidido iniciar acciones de protesta similares a las que llevamos realizando en nuestra ciudad desde hace ya veinte días. Desde aquí queremos transmitir todo nuestro aliento y apoyo a las compañeras de Puerto Real y de Morón, que también han comenzado a hacer vigilias de 24 horas en las puertas de sus ayuntamientos”

Coinciden en señalar que “los continuos incumplimientos del convenio y de los contratos por parte de las empresas, son la raíz de la mayoría de nuestros problemas comunes. Es necesario que se hagan los cambios legales que sean precisos para que la mejora de nuestras condiciones no se vea determinada por la voluntad de las empresas privadas, sino por la voluntad de quien paga el servicio, que no son más que los contribuyentes a través de los impuestos, que gestionan las administraciones públicas. Seguimos manteniendo que se pueden hacer dichas mejoras, pero hay que perfeccionar la legislación para que no quede ni un resquicio de duda que puedan aprovechar las empresas para incumplir o para recurrir las mejoras que se vayan consiguiendo”.

Aprovechan para animar a las compañeras de otras localidades “que nos han manifestado sus ganas de iniciar acciones reivindicativas a que las hagan realidad. La jornada laboral de 35 horas es más que necesaria en nuestro sector. Está más que justificada por razones de salud laboral, tanto física como mental; por conciliación familiar y para mejorar la calidad del servicio que se presta a los más importantes de todo este asunto: los usuarios, nuestros dependientes, que merecen que su trabajo lo hagan las mejores profesionales posibles, en las mejores condiciones laborales que se pueda”.