La Residencia de mayores de Cruz Roja en San Fernando normaliza su situación
En la actualidad, no hay ningún residente afectado por la Covid-19.
El proceso de normalización se está haciendo de forma progresiva
para seguir garantizando la seguridad de los residentes y trabajadores.
En estos momentos, se está trabajando en la adopción de las medidas de prevención pertinentes para retomar las visitas de los familiares, cuando éstas sean permitidas por las autoridades
sanitarias.
La Residencia de mayores de Cruz Roja en San Fernando vuelve a la normalidad tras la recuperación de los últimos residentes afectados por el Coronavirus. Las pruebas realizadas ayer mismo confirman que, en la actualidad, no hay ningún residente positivo en la Residencia.
Esta situación ha permitido al Centro poder normalizar su situación, reanudando los servicios y su actividad ordinaria, y cerrando así la 1ª planta destinada en las últimas semanas, a aislar a los residentes afectados.
Esta normalización, sin embargo, se está haciendo paulatinamente, por grupos, para garantizar al máximo la seguridad de todos los residentes. Desde la semana pasada, parte de los residentes están haciendo vida normal en la Residencia, haciendo uso de las zonas comunes, así como de los servicios del Centro. Está previsto que para el 18 de mayo, estén todos ellos en la planta baja, haciendo su vida normal y cotidiana de siempre.
En palabras del Equipo directivo de la Residencia, “En estos momentos, nuestro primer pensamiento está con los familiares de los residentes fallecidos por la Covid-19. El virus nos ha impactado duramente y han sido semanas muy difíciles. Hoy podemos confirmar que en la actualidad no hay ningún residente positivo en la Residencia, pero seguimos trabajando extremando las medidas de precaución porque debemos asumir que todos vamos a tener que convivir con el virus hasta que tengamos una vacuna o cura”.
Haciendo un somero balance, el equipo directivo afirma que “las medidas tomadas desde el centro y la intervención de las autoridades sanitarias, habiéndose medicalizado la Residencia desde un primer momento, han conseguido que la gran mayoría de los residentes afectados, se hayan curado. La creación de una zona de aislamiento, las medidas de protección personales y el modelo de medicalización del centro desde el SAS, han demostrado su eficacia”.
En todo este proceso, dadas las circunstancias, la Residencia ha reforzado la comunicación con los familiares de los residentes, informándoles puntualmente de la situación y evolución de los casos mediante circulares, llamadas de teléfono y videollamadas. Estas últimas han permitido que los familiares pudiesen ver y hablar digitalmente con sus mayores, a través de una tablet.
En este sentido, todo el equipo directivo, en nombre de todo el personal de la Residencia, reserva un agradecimiento especial a todos los familiares: “Quiero agradecer – declara – a todos y cada uno de los familiares el apoyo y respeto que nos han brindado con su paciencia y comprensión. Nos hacemos cargo de lo difícil que ha sido para ellos esta situación, porque así lo hemos hablado, y sin embargo, han confiado en nuestro trabajo y nos han apoyado desde el primer momento”.
El equipo de la Residencia está trabajando ya en retomar las visitas de los familiares tan necesarias tras este periodo de confinamiento, cuando lo indiquen y autoricen las autoridades sanitarias, aunque tendrán que adaptarse a este nuevo escenario, extremando las medidas de prevención necesarias.