Fantasmas en La Isla
Hoy quiero traer una reflexión propia. Desde que publiqué “San Fernando paranormal” no son pocas las personas que se han acercado a mí para contarme sus experiencias, o para que investigue sus casos.
Curioso todo esto, pues cuando comencé la aventura no eran pocos los que me tachaban de loco, o de ingenuo, y nadie quería ser relacionado conmigo cuál paria desterrado. Seguramente aún tenga quién me tilde de crédulo, pero la balanza se ha decantado para los que respetan mi trabajo pese a no ser perfecto.
La parapsicología, la ufología, la teología y, el mundo “oculto” en general, son ramas con muchos detractores por su falta de rigor científico y el gran subjetivismo que existe tras los grandes casos que demuestran su existencia.
Sin embargo, pese a esos grandes detractores, hoy en día lo paranormal se está convirtiendo en un reclamo turístico, o cuanto menos, en una oferta de ocio apetecible para ciertos establecimientos. ¿Acaso no está siendo la fiesta de Halloween un pelotazo en nuestra ciudad? ¿Y qué es la fiesta de los muertos que el revivir historias terribles sobre misterio? ¿Y los pasajes del terror? ¿O los escape room de temática oscura?
Muchos son los que hablan, pero hay otros que quieren permanecer en el anonimato. Estas personas sufren en silencio lo que ocurre en sus hogares y no pueden sacarle una explicación racional según la santísima ciencia. ¿Por qué muchos siguen poniendo cruces a aquellos en los que creen en algo? ¿Hemos vuelto a los tiempos de la inquisición y no me he enterado?
En San Fernando parece existir muchos fantasmas, desde vivos a muertos, y creo que sólo uno de los dos tipos es nocivo para nuestro lugar. De los supuestos del más allá, deberíamos de sacar partido y hacer rutas como la del flamenco, o la de la Constitución.
¿No estaría bien sacar adelante nuestro folklore más oscuro y hacer un negocio turístico que beneficiara a nuestros comercios de hostelería? ¿No sería beneficioso conseguir así tener más turistas a lo largo de todo el año? ¿No sería positivo no olvidar nuestra historia?
Muchas de estas leyendas van ligadas a nuestro pasado. Un pasado que muchos olvidan y ni siquiera se preguntan por qué ciertas calles, o barriadas, se llaman como se llaman. Muchos personajes históricos involucrados, y muchos momentos de un pasado que se apaga en libros olvidados, o en un selecto club de intelectuales antisociales.
El mundo paranormal es mucho más que una historia mal contada, es nuestro pasado, y no deberíamos de olvidarlo.