Manifiesto y repulsa a la violencia de género en San Fernando
Hoy 25 de noviembre, declarado por Naciones Unidas "Día Internacional de eliminación de la violencia hacia la mujer", como alcaldesa de nuestra ciudad, es para mí un firme compromiso estar aquí hoy, plantando cara y condenando de la violencia machista. Y les agradezco a todos y todas su participación en esta concentración de repulsa.
Un acto en el que, un año más, deseamos mostrar nuestro más firme rechazo hacia la que constituye, sin duda alguna, la mas cruel expresión de la desigualdad entre mujeres y hombres.
La violencia hacia las mujeres que se desencadena contra ella por el solo hecho de ser mujeres.
El ultimo estudio realizado por la Organización de Naciones Unidas sobre la situación de la Mujer en el mundo revela, entre otros muchos, los siguientes datos:
-137 mujeres en el mundo son asesinadas a diario por un miembro de su familia.
-Tres de cada cuatro mujeres y niñas víctimas de trata lo son con fines de explotación sexual.
-Casi 200 millones de mujeres y niñas que viven actualmente han sufrido la mutilación genital femenina
-Alrededor de 15 millones de niñas y jóvenes de entre 15 y 19 años son obligadas a cometer actos sexuales contra su voluntad.
-Cada dos segundos una niña es obligada a contraer matrimonio.
-Una de cada diez mujeres de la Unión Europea declaró haber sufrido ciberacoso desde la edad de 15 años.
Y si nos centramos en nuestro país:
-51 mujeres han sido asesinadas en lo que llevamos de 2019 por su pareja o ex pareja.
-1027 mujeres han sido asesinadas desde 2003.
-Tres menores han sido victimas mortales en 2019 en casos de violencia de género contra su madre y 34 menores lo han sido desde 2013.
-43 menores han quedado huérfanos en este año por esta causa.
Son cifras escalofriantes que nos hablan de mujeres cuya vida diaria es un infierno o incluso que encontraron la muerte a manos de quien se creyó en derecho de disponer de ella.
Cifras que no son solo un número, una estadística, sino nombres de mujeres cuya historia terminó cruelmente dejando atrás familias destrozadas, hijos e hijas huérfanos, padres y madres, hermanas y hermanos desolados ante la terrible pérdida motivada por el odio y la barbarie de un agresor.
Ante esta terrible realidad no puede existir la opción de mirar hacia otro lado o negar la evidencia de que, cada día, miles de mujeres sufren violencia de género y pueden llegar a perder la vida por esta causa. Hoy más que nunca, frente a los que quieren hacernos retroceder décadas en esta lucha, hay que dar la cara, hay que implicarse, hay que poner el foco en las víctimas y trabajar por la igualdad.
Sin duda la unión hace la fuerza, y es por ello que agradezco de corazón vuestra presencia en este acto, al que habéis acudido a mostrar vuestra voluntad de luchar contra la violencia que se ejerce contra las mujeres.
Crear entre todos y todas una red contra la violencia, contra la discriminación y las conductas machistas puede ser ese instrumento válido que sea eficaz en esta lucha.
Una red que nuestra juventud sostenga y amplíe, otorgándole la fortaleza necesaria para conseguir un futuro donde no exista la violencia hacia las mujeres, para conseguir, en definitiva, un mundo en igualdad.
Desde el gobierno municipal nos comprometemos a reforzar las medidas necesarias y coordinadas entre administraciones públicas, privadas, entidades y asociaciones para seguir avanzando en la erradicación de la violencia de género.
El espíritu de unión bajo el que se firmó el Pacto de Estado contra la Violencia de Genero en 2017 debe continuar, sólido e inquebrantable. Y desde aquí pido a quienes como yo tenéis la responsabilidad de ser la voz de la ciudadanía, que sigamos aunando esfuerzos para lograrlo.
Hoy nos manifestamos contra la violencia de genero y en favor de la igualdad.
-Porque no aceptamos conductas machistas.
-Porque nadie debe creerse dueño de nadie.
-Porque el respeto es el mejor instrumento que consolida una relación.
-Porque no admitimos ni una muerte más.
Por todas y cada una de esas mujeres que murieron asesinadas, en su recuerdo y para que su historia no termine aquí os pido que digamos rotundamente: