¿Existen intelectuales, pueden existir hoy?
Pocos se atreven a hacerse esta pregunta, menos a redactarla en un texto escrito, y, menos aún pasarla a la opinión pública. Eso sí, entre amistades el tema es muy utilizado y usado.
Entendemos por intelectual la persona que intenta en las situaciones actuales o de su actualidad, juzgar y sentenciar y argumentar con el mayor grado de veracidad, verdad, bien o bienes de diverso tipo, bienes morales, y, si es posible, bienes espirituales, y, con suficiente belleza en palabras, expresiones, términos, enunciados, argumentos, etc.
El oficio del intelectual secular, era, según expresan muchos heredero del clero, del intelectual que era teólogo o predicador, que desde sermones y desde libros y desde homilías y desde conferencias o desde clases de teología o filosofía o moral indicaba en algunos temas, casi todos, porque existían especialidades, el deber moral correcto, el bien y el mal, la verdad y la menos verdad. Incluso se lo decían a los grandes de la Autoridad Política del momento.
Se recuerda en España, no me acuerdo "el sermón del cardenal de Toledo en las exequias de Carlos V, estando presente su hijo, el ya actual emperador de España, Felipe II". Y, los problemas que le trajo... No podemos obviar y olvidar, los sermones y cartas y discursos de algunas personas del clero hace unas décadas, en ese tiempo del cambio de Anterior Régimen al actual. Pues en medio, el oficio de intelectual lo ejercía, en gran parte de Europa el clero –véase y léase las figuras de Lutero, Zwinglio, Calvino, en la óptica de la Reforma, pero también, cientos de nombres en la Contrarreforma...-.
Pero poco a poco, se fue instalando también ese papel, del intelectual secular, hombre o mujer de letras o de filosofía o de ciencia. De forma incipiente, hasta que con el gran movimiento de diversos procesos de sistemas filosóficos diferentes a lo largo de los siglos y de la Ilustración, pues se crea y cría el intelectual secular. Aquí, aquí pongan el nombre de decenas de pensadores y filósofos y científicos y literatos, que mezclaban según persona concreta, ciencia o filosofía o literatura, o todo junto, para formar esos conglomerados filosóficos políticos teóricos, con ánimo de cambio de la realidad... empecemos por Descartes, Hume, Kant, Rousseau, Marx, Nietzsche, Freud, Sartre y otros cien más...
¿Pero ahora la pregunta es si existen los intelectuales, aquellas personas, que con su cabeza y su corazón, intentan ver y mirar la realidad, no lo que le gusta o gustaría a ellos, según sus prejuicios e ideas y conceptos, sino según el mayor grado de verdad y bien y bondad y eficiencia y utilidad...? ¿Pero también la pregunta, es si pueden existir hoy los intelectuales, cuándo el saber está fragmentado, al menos en veinte grandes saberes, entre ciencias, tecnologías, filosofías, artes, letras, ciencias sociales, teologías, etc., y, nadie es capaz de abarcar todo...? ¿Pero además está el fenómeno de los "tanques de ideas", por lo cual, sustituyen en gran parte a los intelectuales de siglos, y, además, existen cientos de catedráticos de todas las especialidades que se pueden consultar en un tema, o se pueden crear conferencias internacionales para abordar una cuestión...?
¿Pero existe otra pregunta más dolorosa aún, hemos visto en este último siglo, que los intelectuales, existieran o no, siempre los de un lado o los del otro, han ido a la caza de los intelectuales, en mayor o menor grado...? ¿Es más, en el terreno de la cultura, todo el mundo sabe, que no se puede hablar, solo lo que quieran que se hable, porque el que se mueve no sale en la foto, o no se le otorga la cátedra universitaria, o no se le deja publicar en los grandes medios de comunicación, o no se le publican sus libros, o no se le apoyan en las campañas de sus publicaciones, y, al final, se van quedando reducidos en sus existencias y en sus sillones...? ¿Unos, quizás, hayan alcanzado cátedras o plazas de profesorado o similares, otros, ni siquiera han sido capaces de arribar a esos lugares de la cultura o de la enseñanza...?
¿Existen los intelectuales, pueden existir los intelectuales hoy, queremos que existan, queremos que existan de verdad, o vamos cerrando puertas a los que puedan ser intelectuales... dejamos, que existan intelectuales, y no se les castiga o sanciona, porque existan, y, porque hoy, digan algo, con respeto y razones, en contra de un lado, y, mañana digan otra cosa, con el otro lado, pero ambos lados permiten que existan los intelectuales...?
¿O, cuándo surge alguno, y, expresa algo que no nos gusta, empezamos a ponerles ya etiquetas que son injuriosas, o lo dejamos que se mueran en el silencio, o dejamos que vayan cada vez acartonándose como los viejos trapos tirados en algún lugar, les dejamos que sigan con sus conferencias que apenas nadie escucha, y, con sus libros, que apenas leen sus colegas de profesión...? ¿Queremos que existan los intelectuales, si usted tiene un intelectual a su lado, le deja de que exista...? ¿...?
Todo esta cuestión, tema que he tratado más de una vez ya, me lo ha vuelto a recordar, demos el homenaje que merece, Josemaría Carabante, en un artículo titulado: Intelectuales, ¿aún quedan?, publicado en Aceprensa, el 17 octubre del 2024. Invito a usted a que lea este artículo, invito a usted que piense si desea que existan intelectuales, o dejamos este oficio como muerto –si es que algún oficio muere del todo, sino que se cambia de forma o manera..., cosa que en otro tema-artículo tendríamos que tratar...-. ¿...?