El sindicato pide incrementar el número de profesionales que atienden al alumnado con necesidades educativas especiales y reducir la carga burocrática y de dignificar la labor docente.

Ante el inminente inicio del curso escolar, CSIF, primera fuerza sindical en la enseñanza pública de Andalucía, exige a la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional un aumento de las plantillas docentes, la reducción de la carga burocrática que soportan estos profesionales y la dignificación de la labor docente. Para el sindicato, estas reivindicaciones son esenciales para mejorar la calidad del servicio que se ofrece al alumnado.

El sector de Educación de CSIF ha denunciado que a pesar de que en el cómputo total de la plantilla docente se ha registrado un ligero crecimiento, éste no ha sido homogéneo en todas las etapas educativas. De hecho, en Educación Primaria y Secundaria, precisamente aquellas que albergan al grueso de la población escolar, la plantilla se ha reducido en 1.010 efectivos en toda Andalucía en el último año, una merma muy preocupante puesto que ambos niveles educativos son fundamentales para la formación de los estudiantes andaluces. Para CSIF, la disminución del número de alumnos debe conllevar una reducción de las ratios (alumnos por aula), con lo que se mejoraría la atención educativa; pero nunca una reducción del personal docente.

Para CSIF, es imperioso incrementar el profesorado vinculado a la atención a la diversidad, como los maestros de educación especial, Pedagogía Terapéutica (PT) y Audición y Lenguaje (AL), orientadores/as y profesorado para el desarrollo de labores de apoyo y refuerzo, sobre todo si se tiene en cuenta que el alumnado que presenta necesidades educativas especiales ha experimentado un incremento de un 103% en Educación Infantil y un 35% en Primaria y Secundaria. Los especialistas que atiendan a este alumnado sólo han aumentado en un 17% de forma puntual, puesto que son plazas que no se han consolidado. Esta falta de correspondencia desencadena un gran desequilibrio en la atención educativa, que afecta tanto al alumnado con necesidades especiales como al resto.

Otra prioridad para la organización sindical es la reducción de la carga burocrática que soporta el profesorado y que le resta tiempo que podría dedicar a las tareas propias relacionadas con el proceso de enseñanza y aprendizaje. En este sentido, desde el sector de Educación de CSIF-Andalucía se han presentado un centenar de propuestas a implementar sin que hasta la fecha la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional haya puesto en marcha medidas tangibles que minimicen esta lacra impuesta a la labor docente que desvía el verdadero quehacer del profesorado y sólo sirve como mecanismo de fiscalización del profesorado.

CSIF defiende que, además de estos aspectos, es fundamental dignificar la labor docente, mejorando sus condiciones laborales, poniendo en valor la encomiable función que realizan los docentes y las docentes andaluzas e implementando una carrera profesional y medidas reales de promoción interna. A juicio del sindicato, los docentes están sobrepasados en exigencias, tareas, funciones, responsabilidades y, por ello, debe ser prioritario reducir la parte lectiva de sus horarios, lo que se traduciría en una mejora sustancial de la atención individualizada que precisa el alumnado, la mejora de la coordinación docente, y la implementación de las nuevas metodologías, planes y programas de innovación educativa.

Modelo público de FP

Por otra parte, CSIF ha denunciado que la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional ha procedido a reordenar la Formación Profesional a distancia, lo que ha implicado una reducción significativa en el número de plazas ofertadas a los/as estudiantes y una disminución de los cupos docentes. Esta evidente detracción de recursos en la FP pública ha permitido que la enseñanza privada siga aumentando su número de alumnado, un 61% en el último lustro en los ciclos formativos de grado superior.

Para CSIF, la enseñanza pública “es la única que conduce a la equidad y la única universal e inclusiva” y ha reiterado que se opondrá al establecimiento de conciertos educativos, máxime en enseñanzas no obligatorias como Bachillerato y FP. De este modo, considera necesaria una apuesta “nítida y clara” por un modelo público de FP y critica la proliferación de centros privados registrada en los últimos años.

En estos momentos en los que se están gestando los Presupuestos de la Junta de Andalucía para 2025, la central sindical reclama una mayor inversión en la educación pública y que la Junta no mire para otro lado y siga con discursos que se alejan de la realidad.