A pesar de que la transformación de los restos de poda en biomasa viene recogida en el contrato con la empresa encargada del mantenimiento de parques y jardines, IU-La Isla pregunta si las podas excesivas que se ven en la ciudad responden a un interés lucrativo privado que está por encima del interés social y medioambiental. "Es conocido que la combustión de la biomasa permite proporcionar electricidad, agua caliente y calefacción, y que se obtiene de los restos de poda. Queremos que el Gobierno local investigue y explique qué hace la empresa con la biomasa que obtiene de nuestros árboles y si el negocio que existe con ello condena al arbolado de la ciudad a podas que rozan el arboricidio", afirma Alías.Así, Izquierda Unida une su voz a la de la ciudadanía que protesta por el nivel de poda tan agresivo que sufre nuestro bosque urbano. Obviamente la empresa, como cualquier empresa privada, busca su rentabilidad económica, pero por encima de ello el Gobierno local debe anticipar el interés social y medioambiental de La Isla.
"Este Gobierno local no es dado a dar explicaciones, sobre todo cuando se trata de la gestión de servicios públicos que se han puesto en manos de empresas privadas. Como en otros casos, con el tema de la poda deben dar explicaciones sobre el tratamiento de los recursos de la biomasa obtenida de la poda: quién vende y a dónde va el beneficio", cuestiona Gonzalo Alías.
Para Izquierda Unida la biomasa no puede obtenerse con podas tan agresivas, y que el beneficio de dicha biomasa debe ser para la ciudad con carácter finalista, por ejemplo repercutiéndolo en la mejoras en nuestros parques y el mantenimiento del arbolado con criterios públicos no mercantilistas.
Por último, IU-La Isla defiende otra cultura para nuestros parques urbanos, donde el valor medioambiental y social prime sobre el económico empresarial. "Desde Izquierda Unida trabajamos por evitar la degradación de nuestros recursos medioambientales y poner desde lo común la evaluación, el seguimiento y el desarrollo de una normativa de uso y gestión de poda y de biomasa. Ya propusimos en su día un Plan Director de Arboleda que no es solo la catalogación de especies, sino una herramienta útil de uso y gestión de nuestros bosques urbanos, siempre desde lo público", sentencia Alías.