Hoy hace un año
Un año sin nuestro querido Antonio. Tal día como hoy de ese fatídico 2020, una llamada telefónica de mi querido amigo Juan Sánchez Aguilera me anunciaba el desenlace que tanto me apenó. Con voz apagada y con cierta congoja –porque Juan quería como nadie a su hermano– me dice, “Pepe mi hermano ha muerto”.
Quedo quieto, sin reacción y las ideas y los recuerdos se me agolparon formando un nudo en la garganta acordándome de tantos y tan hermosos días con él y su familia, como en los diferentes momentos vividos con ellos en aquellas últimas navidades recibiendo regalos de su familia. Pues fue una noticia que por espera no dejó de sorprenderme.
Justamente un día antes había mantenido una breve conversación a través del teléfono con él, y en esa charla me percaté que estaba mal, muy mal, pues me hablaba con dificultad y de forma muy pausada, pero aún así él siempre en su línea; amable, cariñoso, cercano…“vice, venga que tenemos muchas cosas que hacer en Los Esteros cuanto que te recuperes”, le dije, a lo que él me respondió, “claro en cuanto me ponga mejorcito presi…”. Fue la última vez que hablé con mi querido amigo Antonio, porque al día después se nos marchó para siempre para encontrarse con su madre que tristemente también nos dejó tan solo seis días antes de su marcha.
Serán los muchos y muchos de sus amigos los que fuimos golpeados con la mano despiadada de la realidad tristemente consumada que tuvimos el privilegio de conocerle y quererlo los que sufrimos, suframos y sufriremos su perdida.
Como todos los miembros de la Cofradia Gastonomica Isleña Los Esteros, de cuya entidad, que tengo el honor de presidir, era mi vicepresidente. Nunca me alegraré lo bastante de haberle proporcionado en su día su incorporación en esta entidad, cosa que él y todos los socios de Los Esteros
siempre me agradeció, porque a todos nos hacía feliz en la cofradía.
Al igual que en su siempre querida 'Asociacion de Reyes Magos San Fernando', donde demostró su caballerosidad y gran talla humana, dando a todos una lección de humildad y generosidad por el bien de la entidad y para que en La Isla no hubiera nunca 'Nningún niño sin juguetes' –y dejémoslo ahí–..
En fin…desde hace un año todos, absolutamente todos los que formamos esta entrañable familia llamada Los Esteros no hemos dejado de acordarnos de él ni un solo momento rememorando momentos de su especial forma de ser tan cariñoso, cercano, humilde, sencillo, alegre…como el último viaje que hicimos juntos tan solo unas semanas antes de su marcha a un encuentro de Cofradías Gastronómicas en Huelva…
El próximo sábado nos reuniremos para homenajearlo, pero por muy emotivo y lleno de contenido que hagamos ese acto en su nombre, siempre será infinitamente mínimo para lo que se merecía quien fuera nuestro vicepresidente, de Los Esteros.
Querido vice, desde que te marchaste, hace hoy un año, nunca te hemos olvidado, ni te olvidamos, ni jamás te olvidaremos.