De Alba: "El Real Carenero sigue esperando que Cavada se decida a intervenir en su uso"
En septiembre de 2015, los alcaldes de San Fernando y Puerto Real se comprometieron “a no demorar por más tiempo la puesta en uso del Carenero”.
La concejala del PP de San Fernando, María José de Alba, ha preguntado a la alcaldesa del PSOE, Patricia Cavada, por la marcha de las políticas de colaboración iniciadas en septiembre de 2015 con el Ayuntamiento de Puerto Real para “impulsar definitivamente las instalaciones del Real Carenero y darles un uso que sea rentable para ambas localidades”, según declaró en la citada fecha la socialista isleña.
“Los isleños necesitan saber cómo marcha ese ‘impulso’ que Cavada iba a darle al sitio histórico para poder así valorar, en su justa medida, el trabajo de la alcaldesa del PSOE”, subraya De Alba.
Recuerda la edil popular la “ruta” que se marcaron hace un quinquenio ambos Ayuntamientos (basado en “una serie de reuniones de carácter técnico”) para “no demorar por más tiempo la puesta en uso del Carenero”.
Lo cierto, explicó De Alba, es que en todo este tiempo “ni Cavada ni el Ayuntamiento de Puerto Real han hecho nada por proteger este sitio histórico, tal y como se comprometieron en 2015”. De hecho, en una visita que junto al presidente del PP puertorealeño curso a la zona, la edil isleña comprobó el estado de deterioro que sufre el Real Carenero, y que certifica que nada se ha hecho desde entonces.
“La realidad deja en muy mal lugar a Patricia Cavada. No ha hecho nada, ni por el Carenero, el sitio histórico o el Puente Suazo, que sigue esperando que el Gobierno municipal se ponga a trabajar. Pedimos dos cosas, de un lado que Cavada acabe con su falta de gestión y no vuelva a engañar a la ciudadanía”, manifestó.
La rehabilitación del Carenero y del conjunto de baterías defensivas que forman el Sitio Histórico supuso una inversión de 3,5 millones de euros. Hay entidades culturales isleñas que han denunciado la mala conservación del conjunto, que carece de vigilancia y acusa el paso del tiempo y la desidia de ambos ayuntamientos.