¿Somos números o personas?
Hoy me gustaría hablar sobre las injusticias médicas que a tanta gente afectan. En mi familia pasó y sé lo que se sufre y lo que es. Pero hoy quiero hablar del caso del isleño Fernando Sainz que muchos de vosotros conocéis. Cuando te pasa algo así y encima sin ser culpa tuya es algo que sufres de por vida, y estamos hablando de dolores crónicos, que para mí no hay nada peor que eso: aguantar y sufrir dolores es inaguantable psicológicamente hablando.
Cuando mucha gente ve a Fernando siempre lo ve con esa sonrisa de oreja a oreja, pero no sabe el calvario que está sufriendo, por eso yo os la quería contar, porque jamás se debe juzgar a las personas sin conocerlas.
Fernando fue un paciente que estuvo ingresado 74 días en el Hospital Puerta del Mar tras sufrir una grave infección y operarlo en diez días cuatro veces, con doble peritonitis, dos prótesis en el esófago, fallo multiorgánico y embolia pulmonar, 17 días en coma inducido y todo ello por un “carnicero”, tuvo la mala suerte de encontrar a uno que se sacó el título en una tómbola. Salió con un alta sin tratamiento ni especialistas derivados.
Pronto, hará tres años, desde que Fernando salió del hospital y ¿cómo está ahora? Os lo cuento, cito literal y transcribo exactamente sus palabras.
“Llevo desde que me operé, desde que salí de esta última, quejándome de dolor y, desde hace un año y medio, cansado de goteros y medicamentos y con un alta que no me mandaban ni a un solo especialista ni medicamentos. Hasta mi médico de cabecera se puso las manos en la cabeza en ese momento. Hace un año y medio me colé y fui a hablar con el jefe de cirugía para que al menos me tuvieran un control, si no, tendría que tomar otros medios. Le dije que había puesto una reclamación por daños y perjuicios al hospital al estar harto de que no me hicieran caso, ¿sabéis cuál fue la respuesta del especialista? pues que así ya tendría para comprarme un coche nuevo. Mi respuesta a ello fue que serviría para encontrar buenos médicos profesionales que pudieran curarme”
A Fernando lo derivaron al hospital de Sevilla Virgen del Rocío y, aunque está a la espera de más pruebas, le comentaron que se quedaría en quirófano si lo operaban porque tiene las tripas adheridas a la malla con órganos vitales y, como he dicho antes, todo por un buen “carnicero”. Y encima lleva un año y medio con dolores en las tripas, pelvis y testículos. Y un mes y medio de reposo porque le da pánico que se le salgan las tripas y aguantando el dolor. ¿Creéis que esto es vida? ¿Cómo no pueden hacer nada? ¿Cómo han dejado tanto a esta persona aguantar lo que ha aguantado y sigue aguantando? Yo pensaba que los médicos hacían lo posible por ayudar al paciente, pero vemos en este caso que hasta que no se ha puesto una reclamación, no le han hecho caso. ¿Para eso pagamos una seguridad social? ¿Siempre hay que ir a las malas? Y bueno, como este sé que hay muchos casos: por desgracia, para todo en esta vida hay que pelearse si quieres conseguir algo, es muy triste tener que vivir así y, normalmente, por la experiencia que he tenido, siempre ganan ellos porque se tapan unos con otros.
Espero de corazón que Fernando logre su objetivo que es tener una vida normal y corriente y poder seguir ayudando a la gente con su Proyecto Ayúdame a Ayudar, al que estoy orgullosa de pertenecer. Como sabéis, él es el Capitán “Capi” de esta gran familia que se fundó el 21 de agosto del 2019. Le pregunte a Fernando, ¿porque te decidiste a crear este bonito proyecto? Y esta fue su contestación, cito literal y transcribo:
“Lo quise hacer porque, igual que a mí me ayudaron sin conocerme y se entregaron personas en salvar mi vida, yo salí de ese hospital y me marqué la ilusión de al menos poder arrancar sonrisas a quienes las olvidaron en el camino, como hicieron el equipo de URP y la cuarta planta de Digestivo de Puerta del Mar. No podía quedarme con los brazos cruzados y hoy en día estoy orgullosísimo de lo que creé”
Como he dicho antes, estoy súper orgullosa de pertenecer a esta gran familia que tanto está ayudando a sacar sonrisas como Fernando dice, pero lógicamente queda mucho trabajo por hacer y, aunque tiene mucha ayuda, necesita a su Capitán.
Que haya un medico como este ,no quieren decir que todos sean iguales, ni que la Sanidad Publica sea mala.