Raúl Jordán, futuro candidato a la alcaldía por FE de las JONS.

Son las cifras la que lo dicen, más del 28% de desempleo, tasa de población en riesgo de pobreza del 40%, el desempleo juvenil desbocado, con una deuda de más de trescientos euros por habitante, una carga fiscal impositiva brutal que lastra las rentas de las economías domésticas más vulnerables, que para el bipartito, según declaraciones de la ínclita alcaldesa socialista Cavada la política requisitoria que sufrimos es aún insuficiente, para reducir la deuda municipal de casi treinta y tres millones de euros que han generado ellos mismos, por una nefasta praxis de gestión, siempre de espaldas a los intereses vecinales.

Una deuda que la han generado los partidos tanto los actuales que gobiernan como los anteriores que han dejado a los isleños en permanente ruina económica y que ha arrasado el presente y el inmediato futuro laboral.

Un objetivo de la candidatura municipal falangista es denunciar el secuestro político del Ayuntamiento por todas y cada una de las formaciones representadas en el Pleno del Ayuntamiento que son conscientes de la situación, prefieren acaparar y controlar las asignaciones presupuestarias y el capital impositivo recaudado, para el sustento del inútil aparato corporativo partidista, ofreciendo servicios públicos deficientes y tener a buena parte de la población en precario y subsidiada.

Los falangistas reclamamos que las rentas del trabajo estén en el bolsillo de los isleños y no en las opacas arcas del municipio. Reclamamos la soberanía monetaria de los trabajadores, de las familias, de todos los que formamos el municipio, porque es la única manera de crear riqueza social, de desarrollo laboral y de auténtico futuro de la ciudad.

Basta ya de falsas promesas, los ciudadanos no somos súbditos de ningún político, por eso desde la candidatura falangista que se presentará el 26-M daremos un vuelco a la estructura política caciquil municipal, vamos a darle la vuelta a la tortilla. Reducción drástica del aparato municipal, optimizar al máximo la función pública del Ayuntamiento, reforzando las áreas de los servicios de atención y gestión a los usuarios, no saturando de carga de trabajo a los funcionarios, sino todo lo contrario, para que la gestión y el servicio sean reducidos de burocracia.

Utilizar el suelo público para la reindustrialización, pero no a cargo de empresas multinacionales y deslocalizadas, sino de las iniciativas de los propios isleños, porque son los pequeños y los medianos los que crean puestos de trabajo.

Reduciremos al máximo los impuestos directos, que hoy por hoy suman la nada despreciable cifra de veintiséis millones de euros. ¿Dónde están? ¿En qué se han invertido?.

Un suelo público destinado a la construcción de viviendas sociales para cubrir las más de tres mil solicitudes existentes y que no han sido satisfechas. Equipamientos necesarios, aprovechando y mejorando lo existente, logrando funcionalidad y evitando el despilfarro en inútiles mega infraestructuras.

Estas sí son propuestas reales, que van a cambiar radicalmente la calidad de vida de los isleños, a esto nos comprometemos los falangistas con la colaboración de todos los isleños.