Ventajas y beneficios de acudir a clase de GAP
Gracias a la clase de GAP es una clase colectiva de tonificación específica para trabajar glúteos, abdomen y piernas. En las sesiones de GAP se trabajan estos grupos musculares de forma aislada durante 25-30 minutos para aumentar su eficacia. El monitor o monitora que dirige las clases utiliza música como método de apoyo y motivación para que las clases sean más dinámicas y entretenidas.
Las clases de GAP son aptas para todos los niveles, ya que el nivel de esfuerzo se puede adaptar y cada persona puede regular también hasta qué punto puede realizar el ejercicio, la velocidad y la cantidad de repeticiones.
Para la clase de GAP solo se necesita llevar ropa cómoda y contar con una superficie adecuada de trabajo. De forma complementaria, se puede trabajar con materiales auxiliares para aumentar la resistencia, como picas y/o barras de peso variable, mancuernas de peso variable, colchonetas para ejercicios de suelo e incluso un step, entre otros.
El GAP se ha puesto de moda en los últimos años por varios motivos. Uno de ellos es porque ayuda a combatir la celulitis, problema especialmente delicado para las mujeres. Pero el GAP no es solo para ellas: ellos también pueden obtener grandes beneficios con este ejercicio. Para todos, practicar GAP ayuda al equilibrio muscular de la cadera gracias al fortalecimiento de los glúteos.
Por otra parte, el fortalecimiento de la zona abdominal ayuda a crear una faja de sujección que contribuye a mejorar los problemas de espalda y a proteger los órganos internos. En el caso de las mujeres, esto contribuye también a fortalecer el suelo pélvico, fundamental para evitar problemas de escapes de orina en la tercera edad, muy especialmente en mujeres que han tenido varios hijos.
El fortalecimiento de las piernas es también vital para la estabilidad del cuerpo, especialmente en las personas que por motivos de trabajo o estudios tienen una vida muy sedentaria.
Beneficios del GAP:
Teniendo en cuenta lo anterior, podemos decir que las clases de GAP aportan los siguientes beneficios:
Fortalecimiento y tonificación de glúteos, piernas y zona abdominal.
Definición de los músculos, consiguiendo una figura estéticamente más bonita.
Corrección de problemas posturales y de espalda.
Aumento de fuerza en el tren inferior: glúteos, abductores, aductores, cuádriceps, isquiotibiales y gemelos.
Los ejercicios focalizados permiten mejorar notablemente la fuerza en glúteos, abductores, cuádriceps, isquiosurales (isquiotibiales y bíceps femoral) y gemelos.
Prevención de problemas de incontinencia urinaria gracias al fortalecimiento de los músculos de suelo pélvico.
Estructura de una clase de GAP:
Una sesión de GAP dura aproximadamente una hora.
La sesión comienza con un calentamiento de aproximadamente 10 minutos para poner el cuerpo a tono y evitar lesiones musculares.
A continuación se realizan los ejercicios específicos de GAP durante 25-30 minutos.
Al terminar se hace 20-25 minutos de trabajo aeróbico cardiovascular.
La sesión termina con 5-10 minutos de estiramientos.
Sin embargo, esta estructura puede variarse de forma intencional con el objetivo de conseguir fatigas más localizadas en la musculatura, en el caso de querer provocar una fatiga previa en términos globales a través del cardio, para luego llevar a una mayor fatiga local mediante los ejercicios analíticos. En estos casos, los objetivos de la sesión y el criterio del entrenador deben determinar cuál es el orden más adecuado para la estructura de la sesión.
Las teorías más validadas en estudios científicas hacen hincapié en que el orden de los bloques de entrenamiento no afecta tanto al resultado del mismo si el volumen y la frecuencia se mantienen equilibrados y moderados, y siempre deben programarse estos bloques en función de los OBJETIVOS perseguidos durante la sesión.