“LA FIESTA DE LAS SALCHICHAS” (Puntuación 9)

Esta sorprendente propuesta es una inteligente y corrosiva gamberrada que disecciona con enorme acierto nuestra sociedad actual. La religión, la política y el sexo son tratados de una manera desinhibida y jocosa en una historia en que los productos de un supermercado se convierten en nuestros peculiares álter ego.

Y ni reparan en sutilezas ni se cortan en lo soez, pero no por ello desvirtúan ni simplifican su mensaje. Su actitud políticamente incorrecta rompe las reglas y limitaciones del cine convencional para refugiarse en el cine de animación y así ofrecernos un espectáculo divertido y rebosante de frescura e imaginación.

Esta jocosa fiesta sorprenderá, agradará y escandalizará a partes iguales, pero sin duda es una de los productos más valientes y refrescantes del cine americano reciente.

“EL HOGAR DE MISS PEREGRINE PARA NIÑOS PECULIARES” (Puntuación 8)

La novela de Ransom Riggs reunía todos los elementos necesarios para que Tim Burton pudiera recuperar su mejor cine y su tan particular como fascinante universo. Y así ha sido…

El film es un compendio de belleza y espectacularidad, un derroche de talento e imaginación al servicio de todo tipo de público –aunque esté especialmente recomendado para esos adultos que conservan su mirada infantil-.

Esta nueva obra es adorable y por momentos admirable, recuperando la esencia de ese cine que hizo grande  a Burton y destilando esa sensibilidad que ya conocemos como marca de la casa. No pasará a la historia como la mejor película de su filmografía pero sí será recordada, además de por su calidad, por haber permitido que el cineasta regrese a sus raíces.

A pesar del aluvión de efectos visuales, el film es un maravilloso ejemplo de cómo conservar la magia en un producto que, en manos de otro autor, se volvería peligrosamente impersonal.

“MECHANIC: RESURRECTION”  (Puntuación 5)

Esta innecesaria secuela demuestra una vez más que Jason Statham está muy por encima de la mayor parte de los productos que protagoniza.

Si estuviéramos en los 80 sería uno de los grandes reyes del vídeo club, pero hoy en día se debe conformar con lidiar con productos de limitado presupuesto que no le merecen.

Que “Mechanic: Resurrection” no sea un auténtico bodrio se consigue gracias a su presencia y esforzada interpretación. De un guión ridículo y delirante obtenemos un aceptable film de acción que convence a ratos y que ni mucho menos resulta aburrido.

Pero el gran problema de productos como éste radica en su falta de originalidad y frescura, no ofreciendo nada nuevo por lo que pueda ser recordado.