La industria salinera adaptada a los más pequeños de la escuela
La entidad cultural 'La Caja Inquieta' se reactiva para inculcar valores a los preescolares del CEIP Eryteeia.
El patrimonio natural y etnológico de las salinas. Es el tema que en esta ocasión ha decidido llevar a las aulas -las del CEIP Eryteeia- La Caja Inquieta, una iniciativa con más de cuatro años de experiencia formada por las humanistas Raquel Beltrán y Merche Márquez, ésta última de San Fernando. Es Márquez quien, en respuesta al ofrecimiento de Antonio S. Jiménez -animador sociocultural en prácticas en dicho centro-, preparó un taller relacionado con la temática que en ese momento se estaba impartiendo.
Merche Márquez está acostumbrada a trasladar sus conocimientos a públicos de cualquier edad, en esta ocasión, de tres años: los más pequeños del centro, por lo que confiesa haberse esforzado mucho en adaptar al lenguaje infantil las claves de este oficio ancestral que antaño monopolizó la economía en La Isla. "Siempre intento personalizar las actividades a partir de lo que nos demanden", explica, por lo que tras investigar concienzudamente el tema -lo que se conoce como 'trabajo de campo'-, "empiezo a dar vueltas hasta determinar la forma más apropiada de que los alumnos asimilen la información".
Divide su labor, como es habitual en estos casos, en una sesión teórica y otra práctica. No obstante, "las alargamos o reducimos en función de la edad", explica. Ampliar la práctica es lo que se ha visto obligada a hacer hoy con los alumnos del CEIP Eryteeia, ya que "al ser tan pequeños, es difícil retener su atención". Una vez redactada la propuesta procedió a enviarla. Como en tantos otros encargos, obtuvo el visto bueno y la puso en marcha. Así ha nacido el cuento El burrito salinero -una animal históricamente relacionado con la industria- que, tras una pequeña introducción en la materia, comenzó a narrarle a los pequeños. "A través de esta historia, inventada por mí, he podido introducir a los niños en el mundo de las salinas, el Parque Natural que rodea a toda La Isla y cómo se ha formado", todo ello, claro, empleando un vocabulario adaptado a su edad.
Los valores transmitidos no quedan ahí, ya que la experiencia le ha enseñado a aprovechar todas las ramas que crecen a partir del tronco principal y que en este caso abarcaban, por ejemplo, el amor hacia el mundo animal. "Aprovecho para inculcarles el amor por la naturaleza, la importancia de la higiene y la buena alimentación de las mascotas", indica. También, las relaciones familiares, ya que el protagonista de la historia es un niño que cede su mascota -un burrito- para ayudar al abuelo en su duro trabajo como salinero.
Lo mismo ocurre en la sesión práctica, con canción y dibujo incluido para que los alumnos desarrollen su creatividad. "Sin normas preestablecidas, aunque siguiendo una pauta, la misma que deberán respetar durante su rutina habitual en la escuela".
Licenciada en Humanidades y experta en Gestión Cultural, reconoce las complicaciones que conlleva la actividad empresarial en el mundillo, entre otras razones, "la administración paga a su ritmo... con todo lo que ello implica para el pequeño empresario que da de alta a sus trabajadores para una actividad que no sabe cuándo cobrará". No obstante valora a sus allegados, profesionales docentes, que con cada propuesta la apoyan y está preparada para una nueva etapa en la que la 'Caja' resurgirá con nuevos bríos, más 'Inquieta' que nunca.