Escritor y portada del libro.

El libro estará a la venta a partir del 11 de abril aunque su autor, colaborador de este medio, prevé una presentación anticipada.

La nueva generación isleña de escritores no es una moda pasajera, y uno de sus exponentes -Daniel Fopiani, director de la revista Relatos sin Contrato-, es buen ejemplo de ello debido a su incansable actividad. Si a mediados del pasado febrero anunció un especial de la citada publicación debido a su segundo aniversario, días después vivió la reedición de su primer libro, del mismo título. Ahora sorprende con el inminente lanzamiento del segundo libro de su carrera, en este caso, una novela titulada Lee o disparo.

Pese a considerar que "he crecido literariamente desde mi primera incursión en el mundo editorial", reconoce que sus señas de identidad permanecen inalterables. La historia gira en torno a un editor que se topa de madrugada y en su mismo salón, con alguien que, a punta de pistola, le obliga a leer todos los escritos que le han ido llegando pero éste ha ignorado durante mucho tiempo. El hilo argumental intercala relatos -los de este personaje- con el grueso de la novela, por lo que el género que dio a conocer a Daniel Fopiani continuará presente en cierto modo con esta nueva propuesta. Pero eso no es todo, ya que como él mismo declara, "la historia va desgranándose poco a poco hasta llegar a un final sorprendente". Es otra de las señas de identidad de este joven escritor, acostumbrado a despedir cada historia con un 'martillazo' para no dejar indiferente a los lectores.

La novedad aparte de estrenar género radica en el enfoque, ya que el libro está narrado en primera persona. Pero también en el cambio de editorial. No será Círculo Rojo, sino Multiverso la encargada de editar esta novela, la misma que ya lo hizo antes con las obras de MJ López (Entre la Tierra y el Olimpo), Gema Tacón (La Reina de las Sombras) y Alberto Muñoz Durán (El Don). Dicho contrato ha sido posible gracias al segundo certamen de novela organizado por la firma y que entre septiembre y diciembre de 2015 permaneció abierto a la recepción de manuscritos para que potenciales escritores interesados en ver su trabajo en la calle probasen suerte. Fopiani se enteró tarde pero la novela ya estaba escrita, solo hubo que darle los últimos retoques y someterla a un juicio del que salió favorecida.

Hay que remontarse a 2014 para contextualizar la culminación del trabajo, un año después de comenzarlo tras la edición de Relatos sin Contrato. Debido al cuidado que le caracteriza, alargó el reto algunos meses más para redondear su estilo. Un estilo que aunque sigue siendo propio, considera mucho más cultivado, con un lenguaje fresco y actual, "creo que se nota el crecimiento personal y literario que he experimentado durante los últimos dos años", explica sobre esta obra de intriga -que no terror- apta para todos los públicos.