De izquierda a derecha: Miguel Poveda, Esperanza Garciade y Trini de la Isla.

Francisco Trinidad Ángel, más conocido como 'Trini de la Isla', se prepara para la presentación de su álbum en febrero.

Ante la inminente salida al mercado del primer disco de estudio de 'Trini de la Isla', este medio no ha querido perder la oportunidad de ponerse en contacto con el artista para conocer de cerca sus inquietudes, metas y sueños. Porque 'Mi sueño' es precisamente el título que recibirá este álbum dado que "es lo que siempre he querido, desde que empecé mi carrera artística".

Son las palabras de uno de los mejores cantaores flamencos según la crítica del momento, el mismo que define al gran público este pedazo de talento con tres palabras, sin duda: "pureza, sentimiento y compás". Siendo así no es de recibo lo mucho que ha tardado en obsequiar a sus admiradores con un trabajo de esta envergadura. La razón cabalga entre dos aguas. Por un lado, la falta de tiempo, ya que "si te metes en algo tienes que estar a la altura y dejarlo bien hecho", explica, lo cual por sus múltiples compromisos laborales no ha sido posible hasta el momento. Por otro, ese empuje que a muchos les falta para lanzarse definitivamente a la piscina. En este caso "me costó bastante arrancar, pero los compañeros comenzaron a cultivar el 'gusanillo' hasta que finalmente me decidí", confiesa.

Claro que tanto trabajo y tiempo invertido en el mismo debían traer consigo toda una lista de experiencias, situaciones singulares y anécdotas que quedarán para el recuerdo. Entre los grandes que participan de este reto discográfico se encuentra el gran cantaor Miguel Poveda. El día que les tocó grabar con él tardó mucho en aparecer, "era un momento muy esperado por mí y tanto yo como mi representante, Javier Reyes, no podíamos contener los nervios", recuerda. Tras mucho insistir, su compañero logró que lo llamara, respondiendo Poveda que "no podía asistir a la jornada de grabación por culpa de una ronquera contraída el día anterior". Comprensivo con él, entendió que tuviera que quedarse en el hotel: "no te preocupes Miguel, pisha, no pasa nada..." Pero todo era, en realidad una inocentada, "lo que le contesté después, no lo voy a repetir", confiesa entre carcajadas.

Respecto al trabajo en sí como punto de inflexión en su carrera, reconoce que "me encantaría que fuese un antes y un después", aunque, de momento, lo único que desea es "que la gente disfrute con escuchándolo tanto como yo grabándolo". "El resto lo dirá el tiempo, no soy una persona ambiciosa", aclara. Eso sí, el disco responde al Trini en su estilo más genuino, aunque algunos de los temas que incluye "sorprenderán a quienes mejor me conocen". Se refiere a una rumba muy cañera, así como a la versión por bulerías del tema de Cecilia Gómez 'El ramito de violetas'. Experimentos que no dejarán de sonar a él, moderno pero respetando, como siempre, la esencia de sus raíces.

"Quiero resaltar la labor de mi representante y amigo Javier Reyes, como pieza fundamental para sacar adelante este proyecto, así como a todos aquellos que han colaborado desinteresadamente, entre ellos grandes artistas como Juani de la Isla o Jesús Guerrero", concluye, agradecido.