El Papa Francisco y la Semana Santa
A poco más de dos años de su pontificado, el Papa Francisco no deja indiferente a nadie con independencia del credo que tenga. Y en sus determinaciones tampoco deja de sorprender si nos referimos a su delicado proyecto de reformar la curia -quizás uno de los más interesantes y controvertidos temas que está llevando a cabo- aunque algunos de sus antecesores lo intentaron infructuosamente.
Pero además de esta importante cuestión, tiene entre otras, la que suele citar constante e insistentemente -hay que salir a las periferias-. Y con este discurso y con sus ejemplos, ha movilizado a su ejército de pastores y al gran pueblo de Dios.
El Papa Francisco desde el minuto uno de su elección ha dado muestras suficientes de su humildad, sencillez y de su amor y cercanía hacia los más pobres. Ha renunciado a ocupar los aposentos que utilizaron los anteriores Papas; viviendo en la austeridad de la Casa Santa Marta, reduciendo el protocolo y algunos de los signos externos en las ceremonias y en las indumentarias de las celebraciones religiosas.
A los cuatro meses de su elección publicó su primera encíclica, Lumen Fidei. Y recientemente el 24 de
mayo de 2015 acaba de publicar Laudato Si. Encíclica ésta estremecedora y valiente, considerada como la Encíclica Verde en pos de la defensa del hombre, de la naturaleza y de la sociedad. O lo que es lo mismo, de la Casa Común o del Aire que Respiramos.
Y siguiendo en esa dinámica se ha movilizado varias veces del Vaticano y de Roma como la visita a Lampedusa con motivo de las víctimas del naufragio. La visita pastoral a Asís. Y recientemente a Turín para postrarse ante la Sabana Santa. Además de otra salida al exterior aunque cerca de Italia, concretamente a Cerdeña. Y de sus otras salidas al extranjero como a Brasil. A Israel y Tierra Santa recorriendo a pie la Vía Dolorosa, la Iglesia del Santo Sepulcro y el Muro de las Lamentaciones. A Tirana fomentando la unión entre cristianos. A Sri Lanka y Filipinas al encuentro entre los Obispos. A Sarajevo donde manifestó su preocupación por la crisis y las guerras. Y desde el 5 hasta el 13 de este mes visitará Ecuador, Bolivia y Paraguay. Así como acaba de anunciar su importantísima visita del 19 al 28 de septiembre próximo a Cuba, a los Estados Unidos, donde se entrevistará con los Castros, Obama, disertará en la ONU, saldrá al encuentro de los Obispos y participará en el VIII Encuentro Mundial de las Familias en Filadelfia. Canonizando también al beato Fray Junipero Serra –toda una olimpiada- Y seguramente también vendrá a España.
Otra novedad, ha sido incorporar recientemente, un nuevo Dicasterio creando la Oficina de las Comunicaciones, elevándola a la categoría de Secretaría de donde se distribuye toda la fuente de información vaticana. Evidentemente el Papa se ha convertido hoy en -el primer comunicador del mundo- como lo confirma el gran poder de convocatoria que tiene. Así como la aceptación y el volumen de millones de visitas que su blog recibe en la red. Y es que no cabe la menor duda, que el Espíritu Santo, sabe elegir en cada momento el perfil de su Vicario en la tierra como transmisor de su misión y de la difusión de su evangelio en el mundo.
Por otra parte, en un tiempo record de tres años, ha canonizado a 833 santos frente a los 482 de Juan Pablo II en 26. Convirtiéndose en el Papa que más santos ha proclamado en toda la historia de la Iglesia. Así como también ha creado 19 nuevos cardenales de 15 naciones el 2 de febrero de 2014. Y otros 20 el 4 de enero de 2015.
Y después de este breve preámbulo para lo extenso que resultaría, si se continuara describiendo los actos realizados y los que tiene en proyecto este inquieto Papa, he de referirme ya al segundo término del título de este artículo: ‘la Semana Santa’.
Y en consecuencias poco más cabe añadir ante la propuesta del Papa, si se contempla bajo el espíritu de la ‘unidad’ y de la ‘universalidad’, que pretende, aunque para ello, haya que modificar el calendario Gregoriano, que desde el Siglo III de nuestra Era, venimos observando. No obstante, creo que son las propias hermandades y cofradías y la Iglesia Institución, a las que les competen, valorar su repercusión en todos los sentidos y decidir la conveniencia o no de la pretendida propuesta. Sin embargo en Andalucía y concretamente en la Diócesis de Jaén, ya hay un pronunciamiento a favor de la idea del Santo Padre.
Por tanto, solamente queda añadir, porque viene a propósito citarlo, qué doctores tiene la Santa Madre Iglesia. Y habrá que esperar otros pronunciamientos sobre el resultado favorable o no del cambio de la Semana Santa a una fecha fija, que sería -el segundo domingo de Abril de cada año- según propone el Papa.
El presente artículo estaba destinado a publicarse la semana pasada.