Escúchame con "CH" de cadi
Salimos de unas fiestas muy significativas para muchos y no tan especial para otros, dentro de todo lo bonito que tiene (quitando las compras a tutiplén) y olvidándonos un poco de lo material y del consumismo, al que nos vemos expuesto. Para mí, esta fiesta de las navidades tiene un poder absoluto, es por lo general una fiesta para casi todo el planeta, incluso para el universo, me atrevería a decir, algo hipnotizadora, es especial y si hay vida en otros planetas seguro que celebran de algún modo y de forma parecida sus campanadas, su año nuevo, etc.. Esta fiesta para mí en cuestión, no es mucho de mi agrado, yo soy de los que suspiran cada mañana con más pena que otra cosa, pero entiendo a tantísimas gente que se le ilumina la cara, y tienen una energía que desprenden hacia los demás inmensas. Los entiendo y lo comparto, pero hoy quiero hablarles de la fiesta venidera, una fiesta que se da en muchos sitios, pero en ninguno como en este. Una fiesta, que atrapa a un servidor y lo traslada a otra dimensión, lo atrapa y lo manosea con tal dulzura y dedicación, que debo hacer este retal, para intentar contagiaros un poco y haceros llegar a aquellos que no conocéis los carnavales de Cádiz esta fiesta.
El carnaval, se puede explicar de muchas maneras, para cada uno lo vive y cuenta de una manera, pero desde mi humilde participación en estas fiestas, quiero transmitirles mi punto de vista y conseguir trasladaros con mis palabras a lo que siento cuando estoy viviéndola desde adentro. El carnaval es muchas cosas, buenas y malas como todo en la vida, yo perdónenme y entiendan, me voy a saltar todas las malas, porque para que, y me quedaré con las buenas, como al final de cada año haces balance y al final ese veneno que te corre por las venas llamado febrero, puede con todo y tienes que repetir.
Yo les quiero hablar de las agrupaciones, hay muchos tipos y con muchos nombres, las oficiales del concurso, las charangas, chirigotas, romanceros, coro a pie, etc. A mi me gusta mucho y aunque he probado varias modalidades las ilegales. Esto es solo un parte de la fiesta claro, porque está el concurso, la cabalgata, el pregón, la quema del Dios Momo y otras muchas, pero yo para no extenderme quiero que se trasladen a un lunes de coros a la capital, que busquen entre sus callejuelas, con un vasito en la mano de manzanilla y recorran (con alguien que les guíe, sería lo ideal) sus calles para ver esas ilegales, el carnaval del pueblo, el de la calle, sin censura ( que la hay créanme) el carnaval puro. De ver como un grupo de amigos, conocidos, artistas, familia o lo que sea, se han reunido durante días, horas, meses o lo que sea para simplemente un objetivo hacer reír y feliz a los demás, olvidarnos de los problemas de la vida o reírnos de ellos, utilizar los ricos recursos estilísticos de nuestra lengua castellana y propinar una sarta de metáforas, hipérboles, ironía, símiles, etc. etc. de tal dimensión indescriptibles. ¿Cómo se puede llegar a sacar punta de cosas cotidianas del día a día y ver la vida por unas horas de otra manera?
Desde fuera, desde el espectador la frase más repetida puede ser, yo tengo que volver de nuevo, esto lo tiene que ver fulanita o menganita. Es un estado de euforia y alegría donde dejados llevar por el Dios Baco, se crea un ambiente inmejorable. Desde dentro, la misma energía, pero quizás con un matiz. Cuando te has puesto a escribir unas letrillas para hacer disfrutar a tu gente, porque en ese momento hasta el que viene de Segovia es tu gente. Ves esa mujer con la boca abierta que se le ve hasta los morales y las lagrimas saltadas, o ves a esos niños de cuatro años que te trae el padre en brazos y te canta el estribillo que has hecho para la ocasión, o esa niña que se ha “enamorao” de tu chirigota y ya no se separa en toda la noche de tu lado, esta y otras miles de sensaciones es lo que se vive en una fiesta pagana, donde no existen los santos , ni la religión, nada, es una fiesta que celebra lo que celebra.
Dejemos Pentecostés y la historia a un lado. Es una fiesta de este pueblo de Cádiz y como yo soy muy folclórico respeto todas, desde los San Fermines a la Mascletá, desde el Rocío a cualquier romería con menor repercusión, desde el carnaval de Tenerife al de Sevilla. Eso es nuestro carnaval respeto, aunque haya gente que no lo crea así, porque con alguna letrilla, no muy acertada en alguna ocasión, ha hecho daño a la parte criticada. Así que, si quieres reír y pasar un rato agradable, ya sabes donde tienes que ir. ¿Qué no te he convencido? ¿Qué no me compras? No hay problema. Si por el contrario, quieres probar. Nos vemos en la calle. Saludos y Feliz carnaval.